13/2/08

La moda e Yves Saint Laurent

“La creación de alta costura "no era un arte, sino una manera de acompañar un arte de vivir y a una elite social que han desaparecido, por lo que ya no tiene razón de ser que un costurero, desde su torre de marfil, siga decidiendo o imponiendo si las faldas deben ser cortas o largas. Las mujeres hoy quieren ser libres, que nadie les dicte cómo vestir o comportarse". Y para bien o para mal, "la moda hoy es Zara", sentenció Bergé durante la presentación de la imponente y exclusiva exposición que durante tres meses reúne en A Coruña 47 de los más espectaculares modelos de Saint Laurent. (…)

Recorriendo con los periodistas, ayer, las salas del acristalado edificio que acoge esta exposición, Bergé, el empresario de alta costura, mecenas y acólito inseparable de YSL, tanto del hombre como de la marca que ayudó a crear, comenta con un punto de amargura que la moda, hoy, ya no requiere ser creada por un artista.

"La verdadera creación en la moda no es recrear una fantasía de juventud o el vestido de su abuela, sino que haya un diálogo entre la moda y la calle, una complicidad entre todas las mujeres y el costurero que hoy no siempre existe" en las colecciones de los grandes desfiles, dice.

Las mujeres no se ponen los trajes que se presentan en las pasarelas "y tanto mejor". Pero, ojo, destaca Bergé, la profesión cambió y la alta costura ya no tiene razón de ser, pero la moda de hoy, aun siendo Zara el modelo triunfante, sigue teniendo el cuño y legado de YSL.

"Todas las mujeres llevan puesto algo cada día que deben a Saint Laurent; jugó un papel extremadamente importante en lo que es hoy la moda, porque primero fue Channel quien liberó a la mujer, y años después, él les dio el poder que tenían los hombres, al hacerles llevar esmóquines, trajes de pantalón chaqueta, o saharianas.

Aquello sí rezuma complicidad total entre el costurero y las mujeres.” (Pierre Bergé, cofundador de Yves Saint Laurent, señala el fin de la alta costura. "La moda de hoy es Zara". El País, ed. Galicia, Galicia, 12/02/2008, p. 7)

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